martes, octubre 31, 2006

En la Sierra del Dragon.

El 31 de Octubre, Lunes, del 2006, dia que he tenido libre en el trabajo, aprovechamos "Pablito "y "Papito" para ascender por primera vez como "cordada" a Siete Picos, la emblematica montaña que corona el valle de la Fuenfria y su población, Cercedilla. Siete Picos, nombre que proviene de los 6 picos de su cresta mas el 7º, Majalasna, un poco mas bajo y retirado, tambien fué llamado la Sierra del Dragon antiguamente por su forma.




Nos levantamos temprano y nos dirigimos en la furgoneta hasta el Pto de Navacerrada(1860m), y aparcamos en el parking de la venta Arias. Preparamos a Dablam y Shisha, nuestros perritos.




Les colocamos los arneses de tiro, y a Dablam ademas unas alforjas para que nos ayudase a llevar algunas cosas que no cabian en la mochila. Pablo se acomodo en la mochila, y partimos direccion Siete Picos, nos restaba por ascender un desnivel de 275m, por una ruta facil, sin mas complicacion que un par de tramos un pelin empinados y el peso de pablo en la mochila.
Uno de esos tramos empinados se agarra de salida pues debemos ascender por las pista de esqui del telegrafo, solo 300m pero que para abrir boca es una pasada.
Una vez coronada la pista llegamos a las cabeceras de los telesillas donde tendremos un falso llano con vistas sobre el valle de Valsain y con la Sierra del Espinar y el Monon de trigo de espectacular fondo.



Ese tramo se lo hace Pablo andando, enseñandome las piedras del camino y los pinos quemados por los rayos. Mi espalda lo agradece. El camino que seguimos es el que va hasta las zonas de escalada de las agujas del telegrafo, y que en invierno es una pista de esqui de fondo.
Una vez llegamos al final de la pista de fondo, a nuestra izquierda y derecha parten caminos en descenso, el de la izquierda la famosa senda Herreros que va hasta la pradera de Navarrulaque en el valle de la Fuenfria, y el de la derecha baja al camino Smidth que une el Puerto de la Fuenfria con el de Navacerrada.
El nuestro sale por el centro y cuesta arriba, nos restan 200m de altitud por delante. Pablo vuelve a acomodarse en la mochila, y con ayuda de Dablam y Shisha tirando de nosotros en media hora estamos en el principio de la cresta.





Llega el momento de que Pablo vuelva a descabalgar, y comienza a andar con su baston en direccion al 7º pico, el mas alto de todos, un esplendido monolito de unos 30m de altura que nos dispondremos a trepar.
Mientras preparamos una cuerda de seguridad para unirnos, charlamos con unos montañeros que habiean parado a comer y beber. Se quedaron boquiabiertos al ver a Pablo comenzar a trepar por las rocas con decisión y firmeza.




Subimos por la parte "Dififil", 2º o 3º grado, con Pablo abriendo via. Ibamos en emsamble como esta de moda ahora en las cordadas mas revolucionarias y vanguardistas.
Hicimos cumbre y nos foteamos en el vertice geodesico.




Destrepamos por la parte norte, un poco mas facil que por donde subimos, y una vez llegamos donde habiamos atado a Dablam y Shisha nos damos cuenta de que Shisha no esta. No habia ido muy lejos, estaba unos metros sobre nosotros escalando en las rocas y buscandonos.



Tomamos agua y unos bollitos para reponer fuerzas y Pablo por iniciativa propia propuso volver a subir.





Esta vez lo hicimos desencordados y por donde habiamos destrepado anteriormente. Menos en un par de pasos en los que tuve que ayudarle, el resto lo escalo el solo, incluso alguna travesia a metro y medio del suelo con 20cm de ancho, situacion complicada para alguien que mide 80cm.
Volvió a hacer cumbre, nuevas fotos y de nuevo para abajo.





Una vez abajo recogimos las cosa y nos pusimos en camino hacia la furgoneta, nos restaba una buena caminata.




Comenzo andando el solo con su baston, hasta que llegamos a las pedreras complicadas, allí de nuevo a la mochila. La bajada fue sin complicaciones, si acaso algun tiron inexperado de los perros y el dolor de la planta de mis pies.
En apenas una hora estabamos de nuevo en la furgoneta los cuatro. La excursion nos duró aproximadamente unas 3 horas y media.
Sobre las tres de la tarde aterrizamos en casa para devorar la comidita que nos habia preparado Joanna.

Alé Alé.




El dia fue maravilloso. Pese a que hace 4 dias llovia a cantaros el fin de semana fue respetuoso con nosotros en cuanto a la meteorologia se refiere. El domingo 19 nos levantamos y fuimos a disfrutar de la clasica subida en bicicleta al pto. de la fuenfria. Esta carretera que parte desde los pies de nuestra urbanización se convierte a los pocos kilometros en una afable pista de tierra que, salvo en cortos tramos de inclinación un poco mas exigente, es de una dureza moderada.
Fuimos pues, Pablo y su "papito" a subir hasta donde las fuerzas nos dejasen.
Llegamos a los miradores de los Poetas, lugar donde paramos para avituallarnos y de paso Pablo para practicar "Boulder" subiendose por las rocas de la zona. Mas de una hora pasamos allí, disfrutando de las bellas vistas sobre las cumbres de la sierra, pues desde alli pueden observarse desde las lejanas Machotas del Escorial y Zarzalejo, hasta la Maliciosa, cerca de 25km de cordal con una media cercana a los 2000m de altitud.
Como pasamos bastante tiempo en los miradores decidimos posponer para otro dia el ascenso hasta el mismo puerto, y nos bajamos de nuevo a casa.
Disfrutamos de la bajada, Pablo animandome a ir mas deprisa, pasar por los baches y a dar frenazos y, mientras "Papito" a intentar que la cosa no acabase en catastrofe. Con tramos de velocidad superior a la "moderada" llegamos de nuevo al final de la pista de tierra, enlazamos con el tramo de asfalto y...psssss, Pinchazo en la rueda trasera.
Como solo estabamos a apenas un km de la furgoneta y el pegamento de los parches estaba caducado desde el año 2003 y no llevabamos camara de repuesto, ni nos molestamos en arreglar el pinchazo. Disfrutamos de una caminata de unos 20 minutos en los que Pablo aprovecho para buscar moras, setas y charlar con todos los senderistas y ciclistas que por alli pasaron.
Nota del dia: a todos los ciclistas que pasaban Pablo les animaba con un ¡¡ No te canses!!.
Pese al pinchazo, lo que cuesta acarrear cuesta arriba al muchacho y mi lamentable estado de forma disfruté como un enano.